Chrona II
¿Quién es ella? Decidió preguntárselo, a un conocido, a alguien del pasado, y a un ser querido del presente. ¿Quién es para ellos?, ¿cuánto se conoce a si misma? Empezó preguntándo al conocido, con el cual habría intercalado un par de conversaciones, él la llamó Alma desde el principio; sus palabras fueron las siguientes: -A Alma no le daban miedo las sombras. Había vivido suficientes cabronadas a plena luz como para que las sombras le pareciesen peligrosas. Alma había aprendido a soportar el veneno que le escupían hasta que había dejado de quemarle la piel, había logrado convertirlo en su sangre y ahora nadie se atrevía a morderla. Alma se había endurecido de la peor forma posible y ahora pocos se atrevían a acercarse a ella. Pero ella no era mala. Había olvidado la cortesía, la había sustituido por cruda honestidad, era cruel e incluso desapegada, pero no era mala. Era justa, cruel e imparcial, como una tormenta y, al igual que ellas, las víctimas de sus borrascas podían mal